Desde que Chris Pratt fue anunciado como el Mario Bros. en la nueva adaptación cinematográfica, fue recibido con gran recelo. Se alzaron las voces de quienes defendían el carácter italiano y quienes criticaban al actor por sus posiciones políticas y sus ideologías.
Sin embargo, el clavo final en el ataúd de Pratt fue cuando su trabajo se escuchó por primera vez en el primer tráiler.
A partir de ahí, vivimos una espiral de memes, quejas y pedidos de reconsideración.
Algunas que buscan remover el actor del reparto; y otros que hacen comparaciones entre actores de otros territorios, que, según la audiencia, lo hacen mejor que el propio Pratt.
A pesar de las quejas Super Mario Bros. La película continúa sin contratiempos. Con su plan de llegar a la pantalla grande sin ningún tipo de retraso o cambio, los realizadores de la película ahora se refieren a la polémica.
Y es que tanto Horvath como su compañero en la dirección, Michael Jelenic, afirman que esta es su propia versión del personaje. Aunque Nintendo ha vigilado de cerca cada aspecto de la película, el guion podría considerarse básicamente como una historia de origen. Llegará a los cines el próximo 5 abril de este año.
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